Restricción celestial
Una de las habilidades más aclamadas son las Restricciones Celestiales.
A diferencia de los votos vinculantes, estas restricciones son impuestas al nacer y no pueden ser quitadas ni rotas.
Las restricciones implican perder alguna ventaja a cambio de obtener otra, ya sea mayor o menor. Suelen ser muy variadas, pero un ejemplo común es tener menos energía maldita a cambio de un cuerpo más fuerte.
Restricción Celestial de Toji
Esta es la ejemplificación de la Restricción Celestial en el caso de Toji, una condición extremadamente rara que vacía por completo su cuerpo de energía maldita, impidiéndole usarla de forma tradicional.
A cambio, su cuerpo se vuelve excepcionalmente resistente y fuerte, capaz de soportar maldiciones impuestas sin sucumbir. Además, sus cinco sentidos se ven potenciados significativamente, permitiéndole ver maldiciones incluso sin poseer una pizca de energía maldita.
Toji también percibe la energía maldita mejor que otros hechiceros, lo que le da una ventaja táctica considerable en combate. Muchas técnicas malditas resultan ineficaces al aplicarse sobre su cuerpo, haciendo de él un adversario temido incluso por los usuarios más poderosos. Debido a que carece de energía maldita no es capaz de acabar con maldiciones sin armas malditas.
Cabe destacar que no es común que una Restricción Celestial elimine por completo la energía maldita del individuo. La mayoría de restricciones suelen reducirla o limitar su uso, pero en el caso de Toji, el costo es total —una pérdida absoluta de energía maldita—, lo que hace que su condición sea única y temiblemente efectiva.
Kokichi Muta, conocido como Mechamaru, es un hechicero que posee una Restricción Celestial poco común. A diferencia de Toji, su condición es lo opuesto: nació con un cuerpo extremadamente débil. No tiene brazo derecho, carece de todo por debajo de las rodillas, no puede sentir nada de la cintura hacia abajo, y su piel es tan frágil que incluso la luz de la luna le causa daño.
A cambio de estas limitaciones físicas, obtuvo una enorme cantidad de energía maldita —incluso se cree que posee más que la de Kaito—. Gracias a su técnica maldita, que le permite controlar máquinas a distancia, Mechamaru se convierte en un hechicero sumamente formidable, capaz de operar desde lugares seguros mientras extiende su presencia de combate a través de marionetas mecanizadas.
Maki Zenin es otra hechicera con una Restricción Celestial igual a la de Toji. Sin embargo, su caso era diferente debido a que tenía una hermana gemela: Mai Zenin. En la hechicería, los gemelos se consideran un solo individuo, lo que generó una maldición compartida entre ambas.
Por esta razón, aunque Maki debería haber nacido completamente sin energía maldita —como exige la Restricción Celestial—, poseía una pequeña cantidad, limitada por la existencia de Mai. Esta conexión también restringía su verdadero potencial físico, ya que el progreso de una influía directamente en la otra.
Cuando Mai murió, esa mínima cantidad de energía maldita que ambas compartían desapareció. Con ello, Maki quedó completamente libre de energía maldita, lo que le permitió acceder por completo al poder físico que le otorgaba su Restricción Celestial. Desde entonces, su fuerza dejó de estar limitada por su vínculo con su hermana.
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